PATRIOTAS ESPAÑOLES EN HISPANOAMÉRICA

Felipe González Márquez (presidente del gobierno en tiempos del GAL); José Manuel Lara Bosch (hijo de un prohombre de la dictadura de Francisco Franco Bahamonde); Juan Luis Cebrián Echarri (jefe de los servicios informativos de la televisión de la Dictadura)... Patriotas de ayer y hoy. Todos con pingües negocios en Hispanoamérica. ¿Será por eso que con tanto ahínco defienden la masiva inmigración de mano de obra barata (modernos esquiroles) en detrimento de los derechos políticos, laborales y sociales de los españoles? ¿España es un país de mierda? Eso ha escrito Juanita Samper Ospina en el periódico colombiano de José Manuel Lara Bosch (y ningún patriota de Onda Cero Radio, "La Razón" o Antena 3 Televisión ha resollado). ¡¡Bah!! Patriotas de la unidad de mercado a costa del derecho a la autodeterminación de los canarios, vascos, catalanes... Qué bueno es ahora Janli denunciando a la narcoguerrilla colombiana. El 23 de junio del 2007, una locutora de Radio SER Caridad (dependiente de la Familia Prisa) hizo el siguiente comentario:

"Uribe se niega a limpiar de militares la zona exigida por los rebeldes para que pueda realizarse el canje humanitario".

¿Limpiar de militares? ¿Rebeldes por narcogenocidas? ¿Canje humanitario entre secuestrados y bandidos? Ay, Janli, Janli. Pero como en Colombia algunos no tienen memoria ni vergüenza (sólo la prioridad de las inversiones extranjeras) te dejarán presumir de tu "respetada intelectualidad" en España.


JUAN LUIS CEBRIÁN ECHARRI ALIAS JANLI

 

CAMARADAS DEL PADRE DE JANLI CEBRIÁN

ANTECEDENTES DEMOCRÁTICOS

FELIPE GONZÁLEZ UN AMIGO

ISLAMISTA SOSPECHOSO

ESTO NO LO DESCUBRIÓ CEBRIÁN

MANIFIESTO DE LA MASACRE DEL 11-M

SECTA DIRIGIDA POR CEBRIÁN

TAMBIÉN METIÓ LA MANO EN LA CAIXA

DENUNCIAN LA CENSURA EN DIARIO EL PAÍS

ESTADO DE DERECHO PRISAICO

Qué falta de respeto le tienen a los muertos en "El País". Un anónimo editorialista ha defendido el Estado de Derecho (referido a la inmigración clandestina "regularizada" por los delincuentes políticos sin consultarle a los depositarios de la soberanía popular) frente a la extrema derecha. ¡¡Por Dios, Janli (Juan Luis Cebrián Echarri), ese individuo ha mentado a tu padre!! ¿Quiénes ha violado el Estado de Derecho, pedazo de basura anónima, sino los inmigrantes clandestinos? Tengo una pregunta para ti. ¿Cuántos trabajadores extranjeros tienes en tu casa? ¿Y por qué no has contratado españoles? Ah, ya, son muy conflictivos, exigen más sueldo y ninguna hora extraordinaria gratuita. Qué Familia la Familia Soezcialista. Janli con una mansión vigilada por esbirros y Mr. González Márquez viajando entre México y Teherán por cuenta de Carlos Slim Helú, el hombre más rico del mundo. Por cierto, Janli, qué bonita la entrevista hecha por "la secta independiente de la mañana" a Mahmud Ahmadineyad. Cómo sueñan algunos occidentales con la bomba atómica iraní par "escarmiento" del Tio Sam (aunque sin renunciar a hacer negocios en el "corazón" del imperio). Sin embargo ni media palabra del Holocausto. ¿Por qué, Janli? Tampoco hemos visto a la corresponsal de "El País" Ángeles Espinosa Azofra paseando con velo por Teherán. Qué Familia la Familia Prisa. Socialista y Feminista. ¿Socialista? Pingües negocios desde México hasta Chile, y planes (si no se lo impiden cautelarmente) para infiltrarse en EEUU (territorio hispano ha dicho el sucesor de Don Polanco). Dejar entrar a la Familia Prisa en el "corazón" del imperio (cincuenta o sesenta millones de inmigrantes hispanos, muchos tras haber violado el Estado de Derecho, la ley, las fronteras) será tanto como dejar entrar a Turquía en Europa... causa de perturbación. La presunta defensa del Estado de Derecho por parte de "El País" es como la defensa de los "derechos humanos" de los inmigrantes clandestinos en España por parte de Rodríguez Zapatero, un negocio redondo. ¿Estado de Derecho, Janli? Aún conservo tu carta (firmada de puño y letra, un error impensable en Franco, Antonio Franco Estadella) devolviéndome un escrito sobre la entrevista (supositorio) hecha, en 1984, a Antonio Cubillo Ferreira, meses antes de su regreso (pactado con Mr. González Márquez para su lucimiento frente a ETA) a Canarias. ¿Estado de Derecho? Los intereses del Estado prevalecieron a mi derecho de expresión (y réplica por haber sido aludido en la mencionada entrevista con el secretario general del MPAIAC). Janli, no se puede engañar a todo el mundo todo el tiempo, y menos cuando algunos seguimos vivitos y coleando. Tómate una copita de valium, Janli.

ASÍ OPINAN EN COLOMBIA DE CEBRIÁN

Cuando llegaron a Colombia los bancos españoles se pensó que traerían consigo el dinamismo, la capacidad para llegar a los estratos más pobres y el espíritu competitivo que ha caracterizado a la banca española en su país y en Europa. Se creía que iban a obligar a la banca nacional a ser más agresiva y, en general, que contribuirían a una mayor cobertura de servicios financieros, a menor costo y con mejores productos para la población. El resultado fue otro: los bancos españoles rápidamente se "platanizaron", adoptaron las prácticas, los altos márgenes y demás características de la banca local y pasaron a ser unos miembros más del gremio. Algo similar ha ocurrido con la llegada de los españoles a la radio colombiana. Cuando el GRUPO PRISA adquirió el control de Caracol Radio se alegraron quienes desde Colombia han admirado de lejos a sus propietarios y son lectores asiduos del diario "El País" de Madrid y de su suplemento literario. Se tenía la esperanza de que se reflejarían eventualmente en la radio colombiana los valores comerciales, económicos, culturales, filosóficos, democráticos y humanistas de esa admirable publicación y del grupo económico que la respalda. Se esperaba un ejercicio más discreto del poder de los medios, una mayor independencia, un compromiso con los valores democráticos y un respeto por la cultura universal y la cultura colombiana. Esto no parece estar ocurriendo. Los españoles que controlan una de las dos cadenas que dominan el espectro radial en Colombia parecen estar adquiriendo las mañas, las malas costumbres y la propensión a utilizar exageradamente el poder de los medios de sus colegas colombianos. Todo indica que Colombia no se va a beneficiar de la cultura democrática y liberal que ha hecho que en España haya adquirido "El País" la influencia que tiene. No pertenecen a la tradición de ese periódico ni a su imagen acciones como la que conducirá a privar a Bogotá de la más destacada de sus emisoras culturales, o la campaña a favor de la supuesta diversidad cultural y en contra del TLC en la que están comprometidas las emisoras con entusiasmo fariseo, movidas por los millonarios recursos de publicidad y los intereses de los productores de telenovelas y de realities. Esto no sorprende en el caso de RCN, pues sus propietarios son radicalmente opuestos al comercio internacional, pero sí llama la atención en el caso de los españoles, que dominan a Caracol Radio. España es precisamente el mejor ejemplo de cómo la apertura al comercio y la integración de los mercados con países más desarrollados no perjudica el desarrollo cultural sino que lo fomenta e impulsa en forma muy dinámica. Antes de que se diera la apertura en España, los actores y directores españoles andaban regados por ahí haciendo papelitos o en películas mejicanas para Semana Santa; o haciendo de malos en películas de vaqueros o de policías. Hoy consiguen sus mejores papeles en España y el cine español le ha ganado la mano al resto de Europa en universalidad y en originalidad. Es una industria pujante y refrescante que cuenta con amplios recursos internacionales para respaldar sus producciones. Algo similar se puede observar en el teatro, la música, el ballet y en todas las dimensiones de la actividad artística y cultural. A nadie se le ocurriría en España sostener que el país ha perdido diversidad cultural por haberse abierto al mundo. Pero para el caso de Colombia, a los españoles no les da vergüenza decirlo en sus emisoras. Ese tipo de transferencia de tecnología al revés no le conviene al país. Cuando se les concede la ciudadanía a los empresarios que invierten aquí, debería ponérseles como condición conservar las buenas costumbres y no adquirir malas ideas locales.

Fuente: Rudolf Hommes Rodríguez (ex ministro de Hacienda de Colombia).

NEGOCIOS DE ESPAÑA EN COLOMBIA

A pesar de la compra de periódicos, cadenas de radio y televisión por parte del capital ibérico, poca es la información que se tiene en Colombia sobre lo que la presencia de este capital supone dentro de nuestra vida política, social y, por supuesto, cultural. Hace unos días la presentadora que revela las tres o cuatro curiosidades al final del noticiero CM& dijo esta barbaridad: “El periódico de “El País” está en la línea política de Aznar, o sea del PP, mientras Rodríguez Zapatero, o sea el Socialismo, esta con el grupo político que representa la poderosa editorial Planeta, o sea la extrema derecha del señor Lara”. Esta barbaridad pasó sin que nadie la rectificara. Recordemos que el modelo español de radio fracasó estrepitosamente entre nosotros, pues para nuestro público la sustitución de los programas familiares por programas de sexo abiertamente procaces, y con bronco acento español, no contó con ninguna aceptación y nuestra idiosincrasia se sintió herida. Recordemos los sucesivos fracasos del periodista Bastenier, queriendo convertirse en el salvador del periodismo colombiano con propuestas que no tuvieron eco alguno y debieron ser rápidamente rectificadas. El periodismo como los medios de comunicación obedecen a procesos específicos de una opinión pública determinada, nacen y se desarrollan desde esas causas y búsquedas comunes que alientan en una determinada comunidad y se proyectan hacia esta. Hace 54 años nuestra política tuvo, como bien lo recuerda Otto Morales, a través de Laureano Gómez la nefasta influencia de la derecha española, se formaron grupos de choque imitando a la Falange, la sección femenina de Medellín enviaba jóvenes a la Falange española. Laureano Gómez trajo asesores en educación, para el ejército y la policía. A mi me tocó aprenderme de memoria los nombres de los reyes godos y visigodos según la pedagogía impuesta por la España franquista. Desde luego que la prensa liberal estuvo decididamente de parte de la República y en el suplemento literario de “El Tiempo” colaboraron insignes figuras como Gómez de la Serna, Juan Ramón Jiménez, Salvador de Madariaga. Cuando un conocido empresario mexicano intentó comprar un canal de televisión en España, lo primero que le señaló el gobierno fue que no podía meterse en política. La compra del periódico El Tiempo implica la desaparición del primer periódico liberal de nuestro país y de lo que supone a través de la historia la defensa de unos ideales democráticos. ¿Cuál va a ser la actitud de los periodistas españoles colocados de buenas a primeras en medio de la inclemente realidad colombiana? ¿Los problemas de orden público, de las economías regionales, de los conflictos urbanos manejados y manipulados por uno u otro empresario cuyos objetivos no son otros que los de obtener buenas ganancias? ¿Una opinión pública dirigida por desconocedores de nuestra realidad? ¿De qué manera el abierto enfrentamiento entre la Derecha del PP y el Socialismo de Rodríguez Zapatero nos llegará a enfrentar, ya no a nombre de los principios de la democracia, sino de unos intereses particulares? Esta forzosa penetración económica hecha a través de políticos y empresarios colombianos que, como dije alguna vez, se nos presentan como virreyes coloniales ¿no debe ser objetivada por el gobierno para adoptar ante ella la posición crítica que exige nuestra soberanía nacional? ¿Dónde queda España señores periodistas, señores políticos, señores industriales? Porque la España universitaria, la España intelectual, la España que piensa sigue presente en el proceso de su país y es aquí entre nosotros desconocida en medio de este juego de grandes intereses y de grandes negocios. Darío Ruiz Gómez.


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RAFAEL SÁNCHEZ ARMAS

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